domingo, 11 de diciembre de 2011

Ta Douleur.- Inolora...




 Para escuchar:

Camille - Ta Douleur



Llegó a ser una hermosa escultura de granito pulida a golpe de cincel delante de aquel espejo. Recordar aquellos tiempos me rodea sobre todo de olores a perfumes suaves, de aroma a té hirviendo, a la peste de muchísimo humo de cigarros mal apagados y de sexo consumado. Suena a canciones de viento, a rumores de hojas secas, roces de sabanas, a melodías tangueras…

Por aquel entonces rondaba la más que envidiable edad de ventipocos años, y pasaba muchas tardes fumando un cigarro tras otro mientras fluían las palabras, casi siempre regadas entre copas de vino blanco bien frío, de marcas tan imposibles y amargores tan desagradables que sacarían los colores al peor de los enólogos; al ritmo de estos caldos había risas, lloros, movimiento en los fogones, bromas sobre los vecinos, los vendedores, los amigos y enemigos. Tenía una fuerza encantadora, y un admirable poder para enroscar las críticas más crueles con un sarcasmo que velaba la parte oscura de sus dardos, al tiempo que hablaba con admiración y fascinación de aquellos de los que deseaba aprender. Siempre pensé que conseguía esa transformación porque, en realidad, carecía de maldad. Veía los defectos de los demás, los analizaba, criticaba… pero nunca los tenia en cuenta, nunca juzgó a nadie por ellos, no era más que un inocente juego. Por otro lado, ella solía ser la más acuchillada por sus propias palabras, llevaba como armadura reírse de sus imperfecciones antes que nadie, y la verdad es que vendía sus defectos a bajo coste. Tan bajo, que ella misma se los había comprado, y en esa ocasión, no era ningún juego.

Durante esos años me convertí en la más detallista de las observadoras, la admiraba al tiempo que me producía una profunda lástima, y me descubrí a mi misma estudiando su estilo de vida, en silencio. Creo que le gustaba esa sensación; sabía que la espiaba, disfrutaba sintiéndose admirada y alabada, pavoneaba sus encantos y recogía cada una de las miradas que recibía para coser con ellas la mitad de la armadura que le faltaba.

Hace tiempo que eso no ocurre.

Ahora se sentía sola, terriblemente sola, profundamente sola, la soledad de aquellos que añoran el amor, la soledad de los que han inventado un avatar de fortaleza y grandeza sobre unos huesos de cristal, pero que han terminado fracturándose, dejando que el peso de las mentiras aplasten su vida. La soledad de una pieza de puzzle rota, que ya no encaja en ningún juego. Con el paso del tiempo, fui capaz de ver su vida de montaña rusa en ciclos que se repetían con la naturalidad de un árbol perdiendo las hojas en otoño para volver a florecer en primavera.
Cuando su montaña rusa llegaba abajo arrastraba las zapatillas en el suelo, acuchillando la base de los recuerdos de la última noche de felicidad que recordaba. En esas mañanas, en cada cambio de ciclo, cada vez que perdía las hojas, perdía también, un poco más de la esencia de la persona que yo admiraba y con la que cocinaba mientras tejíamos trajes, buenos y malos, a nuestros conocidos. En cada ciclo su esencia perdía un poco de aroma, pero esta vez… me ha asustado… esta mañana… no olía a nada, ni siquiera a humo.

No sabe a quien escribir, no sabe a quien dirigirse, no sabe lo que tiene que pintar, ni si quiere seguir haciéndolo. Ha perdido su olor y al marcharse este, se ha llevado con él su alma. Ha lavado tanto su pasado con bicarbonato, que no queda una partícula de fragancia que poder aspirar.

Simplemente… ya no huele a nada, y sin olor, en un paralelismo extremo con Grenouille en el Perfume, nadie se da cuenta de que existe.

Está desapareciendo.
Y nadie la amó para cargar con su dolor.

miércoles, 15 de junio de 2011

Infinito

Os dejo, con un poco de retraso mi colaboración en las páginas 22 y 23 de la revista digital "El bombín cuadradro". Os la recomiendo enterita!





La noche llamó a la puerta.

El reloj se acercaba a la una cuando la vi a lo lejos vestida de ternura, sin zapatos, arropada por el ruido de la calle de siempre, en la ciudad de siempre, a las horas en que el ruido se hace eco tras del constante murmullo del agua que acaricia las aceras recién regadas. No está sola, sino abrazada a una imagen de irrealidad, y rodeada por las dudas nacidas de tanto mirar el mundo con gesto de no entender absolutamente nada. Dibuja, en la arena un ocho alargado, de forma tranquila pero constante.
Salto las líneas de un suelo ajedrezado, negro y gris, hasta llegar a la casilla donde descansa la reina blanca, allí donde ella espera sin hacer ningún gesto, cuando los peones ya se han ido a dormir, meditando su próximo movimiento.

- Andrea, algún día, tendrás que decidir cuánto tiempo vas a seguir siendo una estatua que decora la ciudad, para gozo de los curiosos.

- Estoy haciendo un alto en el camino, resobrando el aliento, la noche ha sido un largo deambular por el infinito
—señala con su ojos el ocho desdibujado en el suelo—. es el único camino con una señal que todo el mundo reconoce y que sin embargo no acaba de tener un final distinguido, ni empieza en ninguna frontera definida. Es un viaje en solitario, y solo los cobardes pueden recorrerlo, solo los que caminan con medios pasos nunca llegan al final. No tiene límite de velocidad y las únicas señales que encontrarás son las dejadas por tus propias huellas.

Por no llorar, dice más palabras que de costumbre...

- A veces, pienso que haces poesía de tu vergüenza para buscar algún tipo de redención por no saber disfrutar de la vida. Dejas que las circunstancias te dominen sin hacer nada al respecto.


- Te equivocas, antes caminaba sin destino y me intranquilizaba no llegar a ninguna parte, pero ahora he puesto una etiqueta en mi piel, como el que se tatúa amor eterno o los símbolos que los unen a la modernidad de por vida, o como los melómanos que embanderan a sus ídolos. Igual de bufones somos todos. Igual de encadenados estamos…


… Infinita es la cantidad de metros de hilo que puedes hacer pasar por el ojo de una aguja, infinitos los litros de agua que pueden caer por una pendiente, el número de buenos deseos que entran en una pecera, los golpes de viento que pueden hacer mover una cortina. Esas cosas que hay que disfrutar pero no numerar ni etiquetar; pienso en los petulantes capturadotes de finales y destinos, a los que más que valientes habría que considerar como locos perseverantes de necedades. Pienso en los alquimistas de emociones que no encuentran en las fórmulas matemáticas sus sueños y que terminan convirtiendo lo que era oro en montañas de goma espuma derramada…

…Pienso en parar en Stop, en seguir cuando la luz se pone verde, en entrar en el baño donde hay una figura femenina, en situarme en el lateral de las escaleras mecánicas dentro del metro, en el borreguero fluir del tránsito peatonal, siempre por el lado de la derecha, en las aglomeradas calles, en pintarme como una puta con todos los colores del mundo, en todo lo que nos dicen que es correcto y adecuado. Y pienso lo peligroso que resulta saltarse el protocolo por no leer los carteles. No quiero llegar al lugar que me han marcado… no quiero follar porque puedo, porque aunque no lo creas, prefiero seguir teniendo miedo a elegir mal, porque en realidad es la única manera que existe de elegir. Caminaré a medios pasos sobre el único símbolo que no se puede calcular, porque en su desconocimiento reside la única posibilidad de escoger.


La reina blanca tiene sus ojos verdes enrojecidos por la ira, inundados de azules aguas embravecidas, tiene en la mirada un arco iris que muestra la máxima expresión de sus sentidos. Mi vulnerabilidad ha caído derramada en dos direcciones; ante su carta de colores y ante sus pies desnudos, necesito recogerla en la trinchera de mis brazos, sin que una serie numérica o un algoritmo me marque el tiempo.

Enciende un cigarro, no sé si exhala el humo o su alma.

Imagino acariciar sus manos.

Un caminante se tambalea intoxicado.

La noche se ha ido.
La madrugada entró sin pedir permiso.

jueves, 12 de mayo de 2011

De la piel al papel . Exposición



Estas cosas deben ser las únicas que me dejan sin palabras, e incluso sin música.

Es una Exposición humilde y no muy grande, en un bar, pero para mi... será enorme! Que bonito es sentirse feliz con cosas sencillas.

Quince días después, os invitaré a la segunda exposición, para los que no podáis ir a la primera.
Dos seguidas, no está nada mal, verdad?

Espero veros... y que me veáis en lo mejor que hay que ver de mi! Conmigo o sin mi, mis pequeños os estarán esperando.

lunes, 9 de mayo de 2011

Leyes del amor I



El punto medio aristotélico no se puede aplicar al amor si en alguno de los casos lleva sacrificio.

…no fue capaz de evitarme una sola noche de dolor, pudiendo hacerlo, no pudo evitarme una sola noche de sufrimiento? Alguien que no puede quitarte una sola noche de sufrimiento… no merece tu amor, y por supuesto…no te ama.
Yo añadiría... que ni siquiera te aprecia.
Cuando estás en una relación, y te das cuenta de que pudiendo evitarte una miaja de sufrimiento, el otro no lo hace… es porque todo se ha terminado…

Jorge Bucay



"No se puede desatar un nudo sin saber cómo está hecho."

viernes, 29 de abril de 2011

For me, no...





Hoy, Andrea me ha contado un sueño, un cuento, un recuerdo y una historia. Sus latidos, amargos como el sabor que queda en mi garganta por el exceso de alcohol consumido al otro lado de la barra, son la perfecta combinación que me obliga a contar sus historias, sus palabras:

" El sueño ha sido intenso, real, casi podía olerlo, y al principio no entendía porque algo del pasado me atacaba con semejante fortaleza… hablábamos, reíamos, me rozaba como siempre hacía, de la forma que aun hoy lo hace, entre fortuito y provocativo. Paseamos unos segundos, tan largos como días, luego nos sentábamos todo lo cerca como lo permitía el camuflaje que interponíamos para no ser descubiertos por nuestros conocidos, hasta que sin mirarme, recogió mi mano y la puso sobre su muslo, entonces… me dio un beso tan cálido como la ebullición en que entraban mis venas cuando lo hacía en la realidad. Las imágenes iban tan rápido que no puedo recordar el paso entre ese beso y el momento en que todos desaparecían y me penetraba en sueños, de la misma manera que lo hacía en nuestras citas cargadas de misterio.

Yo…Volaba…y como nos contábamos en nuestras conversaciones secretas, de repente… perdí las alas…

Los colores cambiaron, lo vi ante mí con la media sonrisa de quien porque te aprecia, siente vergüenza de decirte aquello que sabe helará tu sangre:

- Andrea, yo simplemente soy así - con sus manos describe una distancia de aproximadamente medio metro- y tu… eres… - ahora la medida se reduce a unos pocos centímetros-. ¿No te das cuenta de que nuestros encuentros solo ocurren al final del otoño? Solo.. cuando te inunda la fuerza y tus comisuras miran hacia arriba. El resto del tiempo la diferencia de nuestros tamaños… nos separa.

Me desperté tan desubicada como triste y sorprendida. Había insertado en sus palabras todas mis inseguridades, le había dado la clave para desarmarme, me había dado la clave a mi misma para destruirme. No podía distinguir cual era mi propia realidad y no recordaba si a mi lado, en este momento, había algún corazón que me esperara, me recliné en la cama, intentando poner mis últimos días en orden, y cuando las escenas se fueron poniendo nítidas en mi mente… lo entendí todo. Entendí que desde hace años, no intuyo sino sé… que cuando tengo miedo, alguna tormenta se acerca y sé a que clase de tormenta estoy temiendo ahora.

Al sentir que me faltaba el aire, aun con la resaca del torbellino de sensaciones, me levanté, y no puedo decir porque… pero me desnudé por completo delante del espejo… y rompí a llorar, el desnudo más completo, más integral y más sincero que jamás que he realizado.

Sin entender lo irracional de mis actos, me vestí y salí a pasear bajo el silencio de la soledad de las cinco de la mañana, sin dejar de pensar en lo duro y aburrido que era dormir cada día con los pies fríos. Sin dejar de pensar que seguramente, sin saberlo, yo misma le dije lo pequeña que era, y que ahora, podría cometer el mismo error; mostrarme en el escenario principal como una trapecista de cristal que se resbala suspendida de un hilo, que se puede romper con el simple roce de una lentejuela descolocada en mi disfraz, un disfraz cosido tan rápido y con manos tan temblorosas, que seguramente estará lleno de imperfecciones.

Temo el mismo error… estoy cometiendo el mismo error…

No sería bastante buena…
Para mi, no…

...son las palabras q escucho."



Wouldn't be good enough
For me, no

domingo, 10 de abril de 2011

...Or do not dream

Música, pinchando aquí: Barbarossa-Stones

"Love is dangerous for your tiny heart even in your dreams, so please dream softly...

...or do not dream"

Mathias M.



Barbarossa - Stones


Stones that I
Carry around

Every stone's
A story

It weighs me down

But there is gold
Hidden by rock and sand

I have to search
A little
Harder now

Sharp as a marble
These stones keep my feet on the ground

All this experience
Weighs me down

But there is gold
Hidden by rock and sand

I have to search
A little
Harder now

But there is gold
Hidden by rock and sand

I have to search
A little
Harder now

jueves, 31 de marzo de 2011

Deseo






Contaré hasta tres, de la única manera en que sé que no serás capaz de resistirte.
Si cuando gire la mirada, no te encuentras rompiendo la distancia que nos separa, y no has renunciado a las prendas que cubren tu lisa y sudada piel, volveré a contar.
Al final de la noche, me quedaré con la resaca de tus jadeos bajo las uñas, las mismas que laminaron el arco de tu espalda dibujando el camino que señala el límite de mis caderas.
Al día siguiente, contaré otra vez…
… y te inventaré en sueños, cuando ya no estés, releyendo las fantasías que ceceaste… a escasos milímetros de mi garganta desprovista de cadenas.

martes, 15 de marzo de 2011

Buscando...



No quiero dejar esto demasiado parado, y como mis post habituales me exigen un extra de energía, que ahora necesito para un par de ideas que me rondan la cabeza, dejo aquí colgado un boceto antiguo que fue la usado para la búsqueda de personajes del Club de los sueños,al final no formaron parte del equipo.. pobres, pero me ayudaron a definir los perfiles que buscaba.

El niño está en clase de música, pero no oigo nada, qué canción pensáis que está ensayando?

sábado, 26 de febrero de 2011

El Club de los Sueños



Os presento un proyectito que salió tras compartir unas jarras de sangría con una Mandrágora Ojijigogomori en el interior de una oveja negra en Barcelona. Y aunque parezca que la situación no era la más adecuada para una buena idea, resulta que si lo fue.

Tenia muchas ganas de hacer “algo” con principio y fin, y me apetecía hacerlo con alguien, y ese alguien es un pequeño genio al que muchos conocéis; el Chiquimediático David (o rey de la monisimidad).

David tiene un don para crear historias increíbles con pocas palabras, y por cierto, llevo mucho tiempo intentando convencerlo de que cree un libro con sus historias; Un cuento breve para cada noche. Desde aquí pido apoyo a esta plataforma!!!

La idea, no sé si nuestra, o de la sangría, era hacer un cuento con uno de sus pequeños relatos. Así que nos pusimos manos a la obra; su historia, sus palabras, muchas indicaciones sobre la idea y mis acuarelas con un poco de libre interpretación. (;P)

Algunos habéis oído hablar de este proyecto, aunque pocos lo han visto, y ahora, que lo tenemos registrado y ya podemos decir que es “Nuestro”, os muestro un poquito de él; El Club de los Sueños...







martes, 1 de febrero de 2011

Mariposa nocturna

Musica



En esta ocasión, el texto no viene de mi mano, sino de una persona que tengo un gran cariño y admiración; la Señorita M.
De una manera extraña, Manoli y yo nos encontramos paseando de la mano, en el reflejo de dos vidas tan parecidas en pensamiento, que a veces, tenemos que pararnos para saber cual de las dos está hablando. Precisamente por eso, me hacía mucha ilusión este post, que salió como un juego y que resultó ser un extraño (y agradable) desdoblamiento.
Así que, elegimos una canción; "Passou Por Mim E Sorriu". Yo le pondría la imagen y ella el texto, lo podéis leer aquí. Disfrutad de sus palabras y de esta maravillosa melodía.

Os dejo la letra;

Ele passou por mim e sorriu,
e a chuva parou de cair,
o meu bairro feio tornou-se perfeito,
e o monte de entulho, um jardim.

O charco inquinado voltou a ser lago,
e o peixe ao contrário virou.
Do esgoto empestado saiu perfumado
um rio de nenúfares em flor.

Sou a mariposa bela e airosa,
que pinta o mundo de cor de rosa,
eu sou um delírio do amor.

Sei que a chuva é grossa, que entope a fossa,
que o amor é curto e deixa mossa,
mas quero voar, por favor!

No metro, enlatados, corpos apertados
suspiram ao ver-me entrar.
Sem pressas que há tempo,
dá gosto o momento,
e tudo mais pode esperar.

O puto do cão com seu acordeão,
põe toda a gente a dançar,
e baila o ladrão,
com o polícia p'la mão,
esvoaçam confetis no ar.

Sou a mariposa bela e airosa,
que pinta o mundo de cor de rosa,
eu sou um delírio do amor.

Sei que a chuva é grossa, que entope a fossa,
que o amor é curto e deixa mossa,
mas quero voar, por favor!

Há portas abertas e ruas cobertas
de enfeites de festas sem fim,
e por todo o lado, ouvido e dançado,
o fado é cantado a rir.

E aqueles que vejo, que abraço e que beijo,
falam já meio a sonhar,
se o mundo deu nisto e bastou um sorriso,
o que será se ele me falar.

Sou a mariposa bela e airosa,
que pinta o mundo de cor de rosa,
eu sou um delírio do amor.

Sei que a chuva é grossa, que entope a fossa,
que o amor é curto e deixa mossa,
mas quero voar, por favor!

Sou a mariposa bela e airosa,
que pinta o mundo de cor de rosa,
eu sou um delírio do amor.

Sei que a chuva é grossa, que entope a fossa,
que o amor é curto e deixa mossa,
mas quero voar, por favor!

lunes, 24 de enero de 2011

Down on my knees

Una porción de mis "azules"...

Video








Hacia mucho tiempo que no pensaba despacio en Andrea, y mucho más que no compartíamos las que empezaron ha convertirse durante un tiempo, en habituales tertulias de costura, donde apretábamos los dientes suturando una herida tras otra.
Andrea, siempre será en mi opinión, demasiado oscura…
Hoy, era inevitable que ocurriese de nuevo, y nos hemos encontrado en el rincón de los secretos, donde ella iba hilando letras, tejiendo palabras con las que hilvanaba frases en forma de llanto; ha vomitado un océano tan hondo como la profundidad de su alma, con una costura tan negra como el exhibicionismo de su intelecto. Volviendo atrás la mirada ha descubierto que muchas de sus verdades no eran más que mentiras que apestaban a suplicas, y yo desde allí, casi podía olerlas. A fin de cuentas, yo también recuerdo muchas cosas que han sido mentira.
Estaba demasiado ausente y el flequillo apenas dejaba intuir esos ojos verdes que tantas veces he envidiado, pero que siempre me parecieron demasiado tristes. Y después de decirle que debería mostrar con orgullo el tono de sus pupilas, se ha reclinado en la silla, y bebiendo despacio de su copa de vino, ha agachado la cabeza para que se cubriera lo poco que dejaba ver de su mirada.
Sé intuir tan bien sus gestos, que no tenía ninguna duda de lo que venía a continuación, así que he imitado su postura, sabiendo que nada de lo escuchase esta tarde me iba a gustar:

- Tengo ojeras y demasiado sueño. Últimamente he llenado muchas noches leyendo un cielo vacío, allí donde la letra J lo llena todo, un cielo vacío tan lleno de él mismo, que de alguna forma, cuando me sumerjo en sus letras vuelvo a sentir vértigo, como cuando descubrí en la radio el secreto de su voz…

- Olvídalo, Andrea…


- No es él, pero en ese cielo me he enamorado de una historia que algunas veces hago mía; envidio a la sirena… esa sirena llena de amor, repleta de cariño, que tendrá siempre a alguien que la querrá hasta la eternidad. Una mujer de agua, que a través de sus ojos, se hace idílica, no es una persona, la gente que la amaba, la convirtió en energía eterna…

- Sigues jugando entre los puntos suspensivos sobre los que has bailado midiendo el miedo. Todo lo que querías decir y no te atreviste a confesar.

- Quise hacerlo… recuerdas que te pregunté si el niño sería capaz de volar y sin ninguna duda respondiste que si? Ese fue el único punto en que te equivocaste. El niño no saltó… dudó en el acantilado demasiado tiempo y cuando se atrevió a dar el salto, ya no había nadie a quien seguir por el aire.

- Tendría que haber saltado…

- Yo también decidí saltar, lo decidí mientras mostraba partes de mi cuerpo en blanco y negro…
Deseaba saltar cuando insinuaba citas que nunca se hicieron realidad.
Casi intenté saltar mientras oía música entre el humo y la gente.
Al final salté, salté de un punto suspensivo a otro… y en algún momento me escurrí...

- Ese siempre será tu error, que nunca eliges como lugar de salto una línea continua.

Según me voy haciendo más fuerte, Andrea se convierte ante mis ojos en un ser más pequeño y más frágil,y no podré sostenerla durante mucho más tiempo, la observo repitiendo mi última frase mientras recoge migas invisibles que inventa sobre la mesa… y tengo que esconder un rayo de odio que creo podrá leer en mi mirada, y como lo intuye, no es capaz de levantar los ojos hacia mi, mientras me pregunta con voz apagada;

- Y dónde está esa línea continua?

- Donde no existan algunas canciones…

- Entonces, tendrías que dejar de escribir sobre mi, Nines


Sonreímos, echando de menos el humo, y me pregunto, si también llegaría a añorar su tristeza… y me avergüenzo pensando que al menos yo no lo estoy.